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Lunes, 15 Junio 2020 09:00

¿Qué es un ozonizador?

Una máquina de ozono purifica el ambiente de cualquier negocio, edificio o nave industrial. En anteriores artículos nos hemos centrado en las propiedades que el ozono nos ofrece en cuanto a la agricultura y a los cultivos. Hoy hablaremos de cómo una máquina de ozono puede mejorar cualquier ambiente.

Pasamos la mayoría de nuestro tiempo en el interior de algún lugar. Bajo un techo donde, inevitablemente, cuando una gran cantidad de personas van y vienen acabamos inmersos en un ambiente cargado donde los microbios, bacterias y virus pueden desarrollarse y expandirse con facilidad.

La limpieza de las superficies nos preocupa, pero no se suele tener en cuenta una desinfección real, la que no vemos con los ojos y que realmente pueden transportar una enfermedad. Una máquina de ozono es capaz de eliminar virus y bacterias del entorno, gracias al contundente efecto del ozono. Por esta razón las máquinas de ozono se utilizan para el control de la legionella, la bacteria responsable de la enfermedad de la legionellosis.

¿Cómo funciona un ozonizador?

Los ozonizadores generan ozono por medio de una descarga de tensión eléctrica (recibe el nombre de «Efecto Corona»). Esta descarga produce un efecto muy especial. Es capaz de separar los dos átomos que forman la partícula de oxígeno, y a su vez hace que se unan de tres en tres creándose una nueva molécula. Por supuesto, estamos hablando del ozono (O3). El ozono es la forma más activa del oxígeno que se forma por tres átomos de oxígeno que actúa contra compuestos orgánicos patógenos (los principales componentes de la contaminación ambiental).

El principal objetivo del ozono es el de purificar y desinfectar de forma natural, sin que a su paso se generen residuos, y respetando al máximo el medio ambiente. Sus propiedades antisépticas se pueden aplicar tanto a nivel doméstico como industrial. Su efecto ha sido demostrado en diferentes estudios.

Gracias a los ozonizadores se logra la desinfección del aire y del agua, eliminando tanto material orgánico como inorgánico siendo realmente útil a la hora de acabar definitivamente con bacterias, hongos, virus y otros microorganismos.

Sin embargo, dada la inestabilidad de este gas no se puede transportar ni almacenar y eso nos obliga a tener que generarlo in situ, dado que el ozono se reconvierte rápidamente en oxígeno. Por este motivo sus aplicaciones y usos son muy amplios. Es posible aplicarlo al hogar, pero por supuesto también a empresas, centros médicos, colegios… Incluso en el sector hotelero y de la hostelería se pueden beneficiar de la acción desodorizante, descontaminante y desinfectante del ozono.

Existen diversas formas de crear el ozono.